Las aerolíneas estadounidenses dejaron en tierra el pasado fin de semana temporalmente más de 60 aviones 737 MAX de Boeing, después de que la compañía pidió a 16 firmas que operan el avión que aborden un problema en el sistema de energía eléctrica del aparato.
La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), dijo que Boeing notificó a la agencia el jueves por la noche su recomendación de retirar temporalmente algunos aviones del servicio para abordar un problema de fabricación que podría afectar el funcionamiento de una unidad de control de energía de respaldo.
La FAA agregó que está en contacto con las aerolíneas y el fabricante, y se asegurará de que se aborde el problema. El 737 MAX volvió al servicio en noviembre, tras una prohibición de seguridad de 20 meses provocada por dos accidentes en los que murieron 346 personas. El avión ha estado sometido a un estrecho escrutinio desde que reanudó los vuelos.
Southwest Airlines eliminó 30 aviones MAX de su programa el viernes, mientras que American Airlines retiró 17 de sus 41 aviones MAX y United Airlines hizo lo propio con 16 de sus 30 aviones MAX.
Boeing dijo en un comunicado que quiere que 16 operadores MAX comprueben y verifiquen que «existe una ruta de tierra suficiente para un componente del sistema de energía eléctrica».
Las aerolíneas dijeron que no tienen un cronograma inmediato de cuándo podrían regresar los aviones al servicio. American dijo que el problema afecta a 17 de sus aviones entregados más recientemente.
Una portavoz de Boeing dijo que el problema no está relacionado con un sistema de seguridad clave vinculado a ambos accidentes fatales, llamado MCAS, y que provocó la paralización de vuelos pasada por seguridad.
AGENCIAS