La final de la Champions League del domingo entre Bayern Munich y Paris St Germain es un choque de dos gigantes del fútbol europeo actual, pero en términos de historia futbolística el club francés es relativamente nuevo.
Y es que esta no será solo la primera final del PSG en la competencia, sino que se produce 11 días después de que el club celebrara su 50 aniversario.
Para dar un poco de perspectiva, el Bayern tiene 120 años, mientras que el Liverpool, ganador del torneo el año pasado, se creó en 1892.
De hecho, cuando el Bayern ganó el primero de sus cinco títulos de la Copa de Europa en 1973, el PSG tenía solo tres años y jugaba en la tercera división francesa.
Si bien el fútbol francés tiene una historia larga y rica, por años la capital del país estuvo notablemente ausente de la elite y los parisinos mostraron poco interés en este deporte, en el que clubes de provincia como St Etienne y Reims disfrutaron del éxito continental.
La fusión del Paris Football Club y el Stade Saint-Germanois en 1970 creó un equipo que representaba a la cambiante población de la capital gala. Doce años más tarde, en 1982, el PSG ganó la Copa de Francia y cuatro años después logró su primer título de liga.
Con el respaldo de la compañía de televisión Canal Plus, el club atrajo a los mejores talentos, como el extremo David Ginola y el delantero liberiano George Weah.
En 1996, el PSG había dejado su huella en el escenario internacional con un equipo formado por el mediocampista brasileño Raí y el internacional francés Youri Djorkaeff, con el que ganó la Recopa de Europa con una victoria 1-0 sobre el Rapid de Viena.
El PSG comenzó a atraer a grandes nombres, destacando la incorporación de Ronaldinho en 2001, pero el momento clave del cambio llegó 10 años después, cuando Qatar Sports Investment tomó el control del club.
Los qataríes realizaron una gran inversión en su intento por crear un “superclub” que compitiera con gigantes como Barcelona y Real Madrid. David Beckham terminó su carrera en el PSG, mientras que Zlatan Ibrahimovic llevó toda su personalidad a París. A nivel nacional, el club ha dominado la liga francesa, ganando siete de los últimos ocho campeonatos.
Sin embargo, el éxito en Europa ha sido más esquivo. Pese a todo el dinero gastado, incluido el traspaso récord por 222 millones de euros del brasileño Neymar, el PSG no había logrado pasar los cuartos de final de la Champions. Hasta este año.
Las victorias sobre el Atalanta y el RB Leipzig han llenado de confianza al equipo de Thomas Tuchel, liderado además de Neymar por la estrella francesa Kylian Mbappé, situándolo en el partido más importante para los clubes europeos.
AGENCIAS