La voz de la joven cautivó a los asistentes al concierto de Natalia Jimenez
Mía Rubín, la estrella en ascenso de la escena musical, cautivó al público de la Arena de la Ciudad de México el pasado sábado 18 de mayo, al subir al escenario para abrir a la célebre cantante española Natalia Jiménez, quien se encuentra celebrando su viaje musical de 20 años. La poderosa voz de Mía y su innegable carisma dejaron a la multitud asombrada, haciendo de su actuación una velada inolvidable.
Al subir al escenario a las 21 horas, Mía ofreció un set sensacional, deleitando al público con cinco canciones fascinantes. Desde los tonos sensuales de «Diablo» hasta las inquietantes melodías de «Reina de Espadas», Mía mostró su versatilidad y arte en cada actuación. La actuación llegó a su punto máximo cuando dió un adelanto de su nuevo sencillo, «La Barca», una colaboración con Lucero Mijares, cuyo lanzamiento del vídeo está previsto para el 24 de mayo. El público estalló en aplausos al escuchar la interpretación de Mía del icónico clásico de Roberto Cantoral.
Sin embargo, la noche deparó una sorpresa inesperada cuando Natalia Jiménez invitó a Mía nuevamente al escenario para un emocionante dueto, juntas interpretaron «El Sol no Regresa», un éxito atemporal de la antigua banda de Natalia, «La Quinta Estación». La perfecta armonía de Mía y su electrizante presencia escénica complementaron la voz de Natalia, creando un momento mágico que resonó en el público mucho después de que la nota final se desvaneciera.
«La actuación de Mía Rubín fue nada menos que extraordinaria», dijo un asistente al concierto. «Su talento es innegable y aportó una energía al escenario que era simplemente contagiosa. No puedo esperar a ver qué le depara el futuro».
Mía Rubín continúa consolidando su lugar como una de las voces más prometedoras de la industria musical, y su actuación estelar en el concierto de Natalia Jiménez no hace más que reafirmar su estatus como una estrella en ascenso en el escenario internacional.