El gobernador de Hidalgo, Omar Fayad se sintió relegado por su partido, el PRI, luego de no ser tomado en cuenta para tomar la decisión de darle por completo la candidatura al PAN al gobierno del estado.
Fayad calificó como un grave agravio hacia su persona y en redes sociales lo ratificó.
El PRI no es malo, lo malo son a decisiones de sus dirigentes, crees que la militancia no se da cuenta de esta farsa, que sólo se binca todos los procedimientos para imponer una candidatura por la vía de Partido Acción Nacional (PAN).
Redacción